En una sociedad donde la concienciación sobre el desperdicio alimentario ha aumentado en los últimos años, los consumidores ya prefieren marcas que avancen en este sentido. Tanto es así, que ya el 90% de los consumidores lo prefieren.
De hecho, en la actualidad, el 72% de los consumidores son conscientes del desperdicio alimentario en comparación con solo el 33% en 2020. Estos, son datos que arroja el último informe del Instituto de Investigación Capgemini, “Reflejar. Reflexionar. Reconsiderar. Por qué el desperdicio alimentario es un problema de todos“.
Según este mismo informe, los consumidores ya buscan formas de reducir el desperdicio alimentario en casa y en su día a día. de hecho, las búsquedas en redes sociales acerca de métodos para prolongar la vida útil de los alimentos ha crecido un 80%.
Y, aunque cada vez estamos más concienciados, todavía el 60% de los consumidores se siente culpable al desperdiciar alimentos y perciben que los minoristas y productores de alimentos no hacen lo suficiente para detener este problema. De hecho, el 57% está decepcionado y siente que las empresas no se preocupan por este tema.
Y las empresas, ¿qué acciones contra el desperdicio alimentario llevan a cabo?
Según el mismo informe, las organizaciones están adoptando medidas positivas para luchar contra el desperdicio de alimentos en las tiendas y en los hogares de los consumidores. Además, dan consejos para garantizar que las sobras no se desperdicien.
Sin embargo, los consumidores no perciben que estas acciones sean suficientes. Por ejemplo, el 60% de las organizaciones afirman que ayudan a los consumidores a entender términos como “consumir preferentemente antes de”, “consumir antes de” y “fecha de caducidad”. Pero, solo el 39% de los consumidores están satisfechos de que esta información sea lo suficientemente clara. Quieren que las organizaciones hagan más. Pueden trabajar en áreas como la innovación de productos, el envasado, la claridad en la fecha del etiquetado y la información proporcionada a los consumidores. Por ejemplo, a los consumidores les gustaría ver etiquetas digitales (códigos QR, etc.) que les proporcionen más información sobre el recorrido y la calidad del producto.
De hecho, los consumidores sienten que no tienen apoyo suficiente con demasiada frecuencia en lo que respecta a la reducción del desperdicio alimentario. Cuando se trata de prolongar la vida de los alimentos en el hogar, dos tercios (67%) acuden a fuentes de información de terceros. Y, solo un tercio (33%) se informa a través de los envases, los anuncios o las campañas de los productores y distribuidores de alimentos.
Para evitar que los consumidores tengan esa percepción, las empresas deben tomar medidas para ganarse su confianza. El 91% de los consumidores afirma que ellos están dispuestos a comprar marcas y minoristas que divulguen información sobre su desperdicio alimentario, mientras que el 58% aumentará su gasto en empresas que tomen medidas activas para gestionar el desperdicio de alimentos.